







ÉPORE
2025
Naming + Identidad visual












El reloj de arena es una figura que encarna una paradoja armónica: su estructura es precisa, simétrica y calculada, pero el flujo de arena en su interior es libre, natural y orgánico. Cada grano cae siguiendo las leyes de la física, pero con movimientos únicos e irrepetibles.
En arquitectura, este objeto simboliza la fusión entre lo técnico y lo sensorial. La forma controlada del reloj representa la exactitud estructural: cálculos, proporciones, sistemas constructivos. Mientras que el flujo de arena evoca lo orgánico: la manera en que los espacios son vividos, recorridos y sentidos por el ser humano. Así como el reloj de arena solo funciona cuando ambos extremos están conectados, la arquitectura solo cobra sentido cuando la razón y la emoción, la estructura y la experiencia, la precisión y la fluidez, se encuentran en un mismo punto





